El ADN de
ABARTH
Los modelos Abarth son fáciles de maniobrar, dotados de potencia y altas prestaciones, pero, sobre todo, pequeños y “diabólicos”, como el Scorpio. En los años 1950 y a lo largo de los años 1960, la marca se consolidó y continúa su legado como sinónimo de deportividad, altas prestaciones y rendimiento - cambiando el mundo de los coches deportivos.